Cuando se presentan los síntomas y se sospecha que exista la presencia de Reflujo existen diferentes métodos diagnóstico para establecer no solo la presencia de reflujo, sino su gravedad y el mejor método de tratamiento así como el pronóstico de la enfermedad.
En general de acuerdo a los síntomas principales y al criterio del médico se define cual es el método diagnóstico adecuado. Los principales métodos son:
Esofagograma:
En caso de que el síntoma principal sea la dificultad para deglutir los alimentos además del reflujo, se deberá realizar este estudio para establecer la situación anatómica y el diámetro del esófago así como establecer si existe un sitio de estrechez en el esófago. Consiste en ingerir un líquido que contiene un medio de contraste radiopaco (Bario principalmente) y tomar diferentes radiografías que permiten ver la anatomía, movilidad y la presencia o ausencia de una hernia hiatal.
Endoscopia:
Es un estudio muy importante que permite categorizar la Enfermedad por reflujo de acuerdo al daño producido por el reflujo en el esófago, consiste en introducir una tubo delgado y flexible por la boca hacia el esófago y estómago, el cual esta provisto de una luz especial y lentes acompañados de una pequeña cámara que transmite las imágenes a un monitor, Durante el estudio, el médico endoscopista o un anestesiólogo administra un sedante y medicamentos para el dolor por vía intravenosa y se mantiene siempre el control de su presión sanguínea, pulso y niveles de oxígeno en la sangre.
El estudio permite evaluar las condiciones de las paredes internas del esófago, estómago e intestino delgado y así mismo clasificar el grado de lesión producida por el reflujo y en casos necesarios tomar biopsias para su estudio posterior.
Esofago
PHmetría:
El registro del pH del esófago durante 24 hrs sigue siendo el “estándar de oro” para diagnosticar Reflujo, Consiste en medir la presencia de ácido, el tiempo de exposición y el número de veces que el ácido “sube” al esófago durante 24 hrs, Se realiza introduciendo un pequeño tubo a través de la nariz hasta el esófago el cual tiene sensores especiales que transmiten la información hacia un equipo de monitoreo el cual relaciona el número de episodios de reflujo y los síntomas que percibe el paciente, se le solicita al paciente que realice sus actividades de la manera más normal posible durante ese periodo y posteriormente se recolecta la información y a través de un programa computacional se interpretan los resultados.
Manometría esofágica:
Es un estudio que mide el funcionamiento, la movilidad y las presiones del esófago y establece si existe una incompetencia o irregularidad en las contracciones del esófago y de la presión del esfínter esofágico inferior. Se realiza introduciendo un pequeño cable a través del esófago el cual tiene un manómetro que puede medir las presiones de los diferentes segmentos del esófago.
Impedancia eléctrica Intraluminal:
Es un técnica que permite establecer si el reflujo es acido o no ácido y logrando relacionar la funcionalidad con los episodios de reflujo así como el paso del bolo alimenticio, es muy útil en pacientes con síntomas atípicos o que no responden a los tratamientos convencionales. Se realiza con la introducción en el esófago de un catéter con transductores y sensores para medir los potenciales eléctricos y de niveles de acidez y así mismo las características del reflujo, líquido o gas, ácido o biliar.